mario mena mena

La he visto

La he visto en un milagro de colores en las tardes de celajes

otras veces abre su blanco nenúfar en medio de la tristeza

es pasión, respiración intensa del amor que recorre sus dominios

entre llanuras y colinas en el país de los amantes

 

La he escuchado levantar su voz radicalizada en forma de consigna

maquilla las tapias de mi ciudad en reflexiones de graffitis

y hay momentos que en silencio místico, habla con Dios y reza

Se emociona elevándose por encima de los cielos

y recorre planetas y galaxias en su juego de rondas infinitas

 

Sus grandes compromisos son la belleza, el amor y el bien

y nunca da su voz para que las sombras hablen.

(Estas acostumbran estar calladas para no darse a conocer

se disfrazan de silencio para andar entre los vivos.)

 

Se muestra en la forma de vestir de los muchachos

y le gusta viajar en sus mochilas

Come de todo en las cenas de familia

Ama las plantas, las aves, y de todo animal ella es amiga

 

A veces viene y se sienta conmigo toda la tarde

en forma de melancolía

y, nunca me escoge una forma preferida de mostrarse

solamente danza, canta y pinta como una tarde se acaba

y, hay muchas veces que no se si realmente termina

Incluso cuando llega trae consigo un aleteo de mariposas

una emoción fina que pide ser atendida pronto si no se evapora

Ella se llama poesía.