le mita

Amor arrancado

Mucho ya hemos mamado de la vida

aun asi solemos ser mimados por el sol

angustiar y portar mal bajo la luna

de una herencia que solo conoce ida.

 

Estaba manejando a la deriva

luciérnaga alumbra mi senda

oídos y ojos buscando a la diestra

lo que manos y pies inclinan a la siniestra.

 

Un talco liso y suave

esa eran tus lágrimas de alquitrán

salían cual abejas en enjambres

que solo la luna y el descanso bailaban

al todo o nada morían

último, total

para cuando la vida

si hoy el néctar no aflora

que el panteón se encargue de la maceta.

 

Hoy he vivido como ayer nunca

saliendo de la magia, brilla la nuca

perezoso al fastidio

cual baluarte al presidio

sin antes no

un beso robarte

y un verso arrancarte.