(RELATO EN PROSA DE DOLOR)
Un panico infernal me corria por las venas,
vientos enfurecidos golpeaban mi ventana,
el rio se desbordaba, como el diablo celoso
llevandose en su cauce, todo lo que encontraba.
El viento abanicaba sin piedad las paredes
y yo por mi ventana,cabizbajo miraba,
multitudes gritando,suplicando un alojo,
pero en aquel momento, lo normal no existia.
Quedo todo desierto, en un mar de amarguras,
aguas contaminadas, desperdicios humanos,
ciudades arropadas, como una maldicion,
que bajara del cielo con rabia despiadada.
La lluvia intolerante golpeaba mi ventana,
y el miedo hacia la muerte, seguia incrementando.
Pero llego la calma, cuando ya hera muy tarde,
mi ciudada y mi pecho, ya estaban destruidos.
Al dia siguiente todo parecia extrano,
como si una tropa de soldadod feroces
hubiesen tendido una emboscada
destructible y masiva para aterrorizar al mundo.
O tal vez una nave espacial piloteada
por el demonio, para ahogar sin piedad
a los que en Dios creian.
Habia una inmensa soledad,
no casa, no agua, no luz
y muy pocas esperanzas, porque todo lo perdi.
Ahora solo queda el amargo recuerdo,
de una imagen que jamas se borrara.
Solo pido para los hombres;
valor y resignacion, para las mujeres
fe y perseverancia,
y para mi, solo pido CLEMENCIA.
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