Vencida ya la angustia, pone fin a mi ocaso.
Mi vida toma el rumbo, el de no retornar.
No hay luz en mis pupilas, no hay ansia en mi palabra.
Me muero y en mi muerte, lleno de idolatria.
Brindare por tu vida, seas feliz sin dolor.
Dios quiera que la suerte, te acompañe donde quieras.
Ya ves si es sincera, mi postrera ilusion.
Bendita muerte mia, que consigo con ella.
Verte junto a mi, temblando de emosion.
Sera acaso la dicha de verte, tan cercana.
Que me da alegria, de morir por tu amor.
Tal vez desde alla arriba, yo cuidare tu vida.
Vigilare tus pasos, y velare por ti.
Y si arriba en el cielo es permitido amarse.
Esperare constante, tu vuelo junto a mi.
En este trance amargo, que mi vida se extingue.
Y toma ya un declive, mi pobre corazon.
En vano son las lagrimas, por eso estoy alegre.
Y solamente ansio dejarte mi perdon.
No llores que no quiero, ver triste esa carita.
Ya que por linda, siempre alegre debe estar.
Por Dios no martirices, mi ultimo suspiro.
Brindame una sonrisa, que euirop descansar.
Autor: Abdon Claro
(Escrito en el año 1947)