Angel Miguel

la dama

La dama que ahora

el corazón anima

la musa encantadora 

por la que mi corazón palpita

la mujer a la que mi poema estima

Dios la creó como una diva  

quizás quería que mi sueño

quede impreso en su poesía

para velar el secreto

que sus rojos labios nos lo enseña

la mujer bella en su destino

es su interior lo que le da aún más belleza

no es su vestido lo que la hace más viva

es la doncella cuyos sus labios miran

es su misterio lo que no lastima