DE LA MANO CON MI AMIGO, A LAS NUBES... YO ME VOY
De la mano con mi amigo
confiado he de caminar,
él me eleva sobre abismos
sin dejarme resbalar.
En caminos pedregosos
no me deja tropezar,
aunque el fango me rodee…
él no me deja ensuciar.
Cuando ando entre espinas
en sus brazos él me lleva,
las arenas movedizas
del camino/ no me anegan.
Las fieras y los peligros
que me asedian en mi andar,
cuando lo ven de mi lado
no se quieren acercar.
A veces llueve la lluvia,
y el trueno me hace temblar,
los relámpagos me asustan
y el rayo me hace encuevar.
Pero su luz es tan grande,
su presencia es tan real…
que con sólo él mandarle/
la tormenta ha de cesar.
De la mano con mi amigo,
con Jesús mi capitán,
él me lleva de la mano
a su celestial hogar.
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