AZULNEFERTARY

AZUL ( Segunda Parte)

-DICIEMBRE, las calles llenas de luces iluminaban con alegría  la ya pronta Navidad, época de grandes deseos y buenas acciones, --Azul estaba emocionada, ya que esta Navidad sentía que seria diferente, ya que Ranses y ella se habían hecho muy amigos a partir de ese accidente en la Feria. Llego la Noche Buena, después de la cena y los regalos.—Azul salio a tomar aire fresco en esa noche fría, recordando y pensando en como se encontraría su madre en ese momento, ya que hacia mas de un año que no sabia de ella, respiro profundo y alzo la mirada  observo el inmenso cielo despejado, en el cual se podían observar los destellos de las  estrellas que asemejaban a miles de ojos curiosos que observaban, la luna llena en todo su esplendor iluminando así todo a su alrededor era una noche muy hermosa y mágica.

 

--¿Son muy bonitas verdad?---Azul se sobresalto y al bajar la mirada, ahí estaba el

--Ranses que se encontraba frente a ella—me has asustado le dijo ella—lo siento Azul no quise hacerlo, pero es que estabas tan absorta observando que no quise interrumpir.

--¿ como la has pasado con tu familia? Pregunto Ranses---Muy bien gracias mi papa se ha sentido algo indispuesto y se acostado, mis hermanas y yo hemos salido a felicitar a nuestras amigas, ¿ y tu que tal?---Pues como todos los años después de cenar mi padre se ha acostado, mi mama y mi hermana han ido a visitar a la abuela y mi hermano y yo hemos salido a pasarla con los amigos.

--Sabes Azul yo necesito decirte algo.—Dime Ranses que es lo que quieres decirme

--Azul, sabes eres una niña muy linda y una gran amiga, pero yo quiero ser mas que tu amigo, porque estoy enamorado de ti. Y me gustaría saber ¿ si aceptas ser mi novia?

--Azul se sonrojo, ella también lo amaba y eso era el mejor regalo de Navidad, que ella recibió esa noche.—Puedo pensarlo contesto. – 5 segundos respondió Ranses---Acepto.

Dijo ella. Sellamos nuestro noviazgo con un beso pregunto Ranses—Ella asintió con la cabeza nerviosa. Ese seria su primer beso, cerro los ojos, entreabrió los labios y sellaron su pacto de amor.