Que inmenso alivio
Cuando llega la noche
El silencio se nutre abriendo su broche
Dejando escuchar el grillo en su derroché
La lluvia que cae y la brisa que canta su tonada
Y me invita esa noche a meditar
Me lleva a un hermoso relax
Y me brinda su cama de reposo
Para descansar del arduo día
Dejando las olas de la mente descansar
En un constante recuerdo con el bien amado
Me sumerjo en ese tic tac
Y ya las olas de la mente no tienen cabida
Me deleito en su recuerdo
Y me dejo absorber por su amor
Cada segundo, cada minuto
Y así solo así puedo entender
La creación y al inmenso creador
Es una paz que solo se logra
Cuando paran las olas de la mente
La mente se siente en la gloria
Y el alma vuela a su morada
El alma entiende su venida al mundo
Es como un viaje pasajero
Ella practica la meditación
En un constante recuerdo en su creador
Y así se mantiene unida
Va dejando los grilletes
Que la tienen prisionera
Y a cada segundo
De ellos se libera
Y bebe de la paz eterna
Con mi amor Linda
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