Hija del Sol

¡CÓMO DUELE UBICARSE!

Que triste cuando la vida te bofetea

cuando de golpe te dice: “Ubícate”,

cuando no sientes que “eras” o “estabas”

cuando en ello alguna esperanza albergabas.

 

Sé que no es mi tiempo, ni mi momento,

pero lo hice mío, lo lamento…

llegó y soñé vivirlo de alguna manera,

quizás en mi vida era otra prueba.

 

Se me hizo muy grande e intenso,

intangible lo sé, pero inmenso...

como nunca jamás había sido,

limpio, puro y hasta seductivo.

 

Hoy no sé qué pensar...duele pensar…

cómo duele “ubicarse” y no “estar”,

vuelve aquel viejo dolor en el pecho,

aquel que me dejó todo desecho…

 

Esta noche el silencio será mi almohada

Y la tristeza mis sábanas de tormento,

por lo que “pudo ser” en algún momento,

o por no entender lo que escrito estaba.