Inmaculada Carrasco

LA MONEDA

Esa tarde salieron a jugar dos amigos pobremente vestidos,

buscaban el momento feliz del juego, a los que se entregaban divertidos,

después de un día duro, de una tarde sin rumbo,

orgullosos de que en ese día habían subsistido,

les quedaba el juego, estirpe de su infancia,

con el que imaginaban un futuro, una oportunidad,

deseo de un subconsciente, que por un rato eran libres de soñar.

 

Mientras jugaban, vieron resplandecer algo en el suelo,

se acercaron curiosos, sorprendidos era una pieza de plata,

redonda en forma de moneda, cómo no, ambos  fueron a por ella,

sus manos se lanzaron y juntos se aferraron, a esa pieza hermosa para ellos,

que durante un tiempo, podría calmarles el desaliento.

 

Pero mientras apretaban, sus miradas se cruzaron,

y como una transmisión ambos pensaron,

la amistad es ante todo, y ambos estamos necesitados,

no sería justo que por la fuerza nos la lleváramos,

entonces hicieron un trato, lanzaremos la moneda al aire,

y el ganador será digno de ser su amo.

 

Mientras la lanzaba, ambos pensaban,

si gano yo, se la cedere a mi amigo,

porque es mi compañero, puro y desinteresado,

con el que comparto mi tiempo, mis juegos, penas y agrados.

 

Y la moneda se lanzó al aire, al caer, una cara se veía,

al ir a recogerla se percataron que las dos caras eran iguales,

algo mágico ocurría, o la moneda respondió ante la generosidad

que les unía.....

 

Y como si supieran lo que había pasado,

sin dudarlo la entregaron,

a un hombre que dormía sobre un cartón mojado,

y comprendieron que la vida, te hace afortunado,

porque lamentablemente, siempre hay necesitados.

 

 

 

" La vida es la mejor jugadora de cartas y reparte en el momento justo, las buenas acciones se premian, te devuelven lo que has dado, el daño se castiga, aunque no lo veamos"