BENJAMIN ROMERO

A MI QUERIDA HIJA

..

,, El  alma me pesa cuando tu rostro deja de sonreír,

cuando asoman largas figuras de nostalgia en esas miradas y

se tornan tan tristes que sin querer se humedecen mis ojos,

no es llanto, solo melancolía de no ver otra vez tu sonrisa

en aquel rostro, del cual tengo recuerdos

amanecerán las mañanas frías de neblinas inmensas,

se tornarán mis recuerdos álgidos, pero seguiré extrañando

aquellas muecas de tu sonrisa pícara de niña consentida

volverán a caer las tardes con sus lloviznas  frías

volveré a cubrir tu cuerpo con las cobijas de invierno

cuidaré tu sueño con celo de vigilante eterno

y rezaré a tu lado con la devoción de  padre

por el amor eterno a su hija….

Para mi adorada hija Oriana