Te amo irremediablemente,
Inconscientemente,
irrevocablemente,
… y es que sólo así te puedo amar.
Te amo con un amor no exento de deseo,
no escaso de penurias,
de lágrimas, de desvelos.
Te amo desde adentro.
Desde el fondo mismo de mis entrañas.
Te amo con ese amor que siempre he negado,
que nunca fue entregado,
que maliciosamente guarde.
Te amo cuando más amar no puedo.
Cuando la vida me cierra las puertas,
cuando aun me quedan cosas sueltas
que se escurren de entre mis manos;
la felicidad, los nuevos veranos,
… las caricias a tu piel.
Te amo con este amor comprometido,
con mis dedos inexpertos,
con mis ojos casi muertos,
con el invierno en mi ser.
Te amo así pues no sé de otras maneras.
Te amo y amo tus lunares,
y las uñas de tus dedos,
el olor de tus cabellos y tus pasos al llegar.
Te amo así, te amo así.
Porque no sé amar como quisiera.
Te amo con un amor comprometido,
sin las sombras del pasado, sin la bruma del olvido.
Te amo así, te amo así, como siempre había querido.
Te amo aun cuando jamás lo hayas notado,
aun cuando tú ni me conocieras,
aun cuando tú no existieras.
Te amo así irremediablemente y sin fronteras.
Te amo así, te amo así,
como aman la noche,… las estrellas!
© Armando Cano.
8/IIX/012.