Delalma

AHORA ELLA NO ESTÁ…

 

De  áureas mañanas soy constante

Divagando incierto en el néctar de los dioses

Hurgando huellas en las nubes de tabaco

Por si algo hubiera, de los pasos de mi amada.

 

En  copa de oro guardo religioso

Lo dulce de sus besos y la luz de su mirada

No es magia escondida, son joyas bien habidas

Aunque a veces sea preso de tristezas y añoranzas.

 

Fue con ella que al parnaso me allegué

Cabalgando entre la lluvia y el misterio

A la nostalgia despojamos su pobreza

En la tierra de azahares perfumada.

 

Ahora ella no está, pero me llama

Con su voz de oro prendidas del nogal

y aquel aroma a nueces, que el viento mece

Por este devenir de reinos breves, peregrinos.

 

Inefable es el amor que cultivamos

Pero se hunde con el peso de los años,

En los humedales del tiempo y la nostalgia;

El mar arropará mi sino, yo cobijaré mi pena.

 

Delalma

03/08/2012 12:08 a.m.