AQUEL

Sueños de una noche

Hoy me desperté
y mi cuerpo se hizo ruinas

He soñado toda la noche
que como calabozo
tu mirada punzante
se hacía mi presa
y allí
no cesaba de remover mis muros.

Hoy me desperté
y mi cuerpo se hizo frío

Te nostalgié lo indebido,
te miré lo no permitido,
y tú esquiva.
Quién inventase los sueños
hoy sé que no es de fiar.

Hoy me desperté
y deje de ser para serte.

Dejé de verte
como destino,
ruta
o paraíso,
te hice más humana,
y dañina también.
Y te vi
pero te desapareciste
como los sueños.

Hoy me desperté
y mi cuerpo ansia caminarte,

hacerme tu orilla.
Si te vas me dejo ir,
si te quedas, en cambio,
no te dejaré de naufragar.