En este momento en tu expresión esbocé un horizonte de ternuras sueñas, las que no conocía y despertaron a través de tus gestos de emociones contenidas, algunos sentimientos desnudos para tus ojos confiados de mirada omnipresente, soñadores…
A espaldas de tu expresión contenida, nerviosa de ser descubierta, tus emociones llegan a mis huesos con lo que me entregas con tus manos… que aparecen dulces como leche materna de siempre y nuevas como una dádiva anhelada, pero embriagantes como la espuma del vino nocturno y la niebla…
En el idioma eterno de tus besos despojados, tus yemas delinean caminos en mi lienzo pretendiendo alcanzar las estrellas con tu boca…
A espaldas de tu sonrisa siempre eterna y estelar, tu mirada tan intima despoja mi alma cruzando la isla desierta de mi corazón, pájaro de fuego encendido por la ganas de vivir a destajo su destino…
A espaldas de mi huella presente me quedaré recostado en el borde negro de tus ojos que delineó mi vida en dos días y tu tiempo en el espacio sin época aparecido.
Detrás de tu sonrisa me fraguaré perpetuo para que de tu mano me muestres las estrellas con tus yemas y volemos con el pájaro de fuego, a espaldas de tu expresión nerviosa, a espalda de mi marca presente, buscando el universo en un día con tu vida.
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