No sé en qué momento
la luz es tenue
y se apacigua con las horas
el tocador callado el buró en su esquina…,
los ceniceros tristes pues no fumó hace tiempo
-tú entre mis brazos-
Yo te miro y pienso.
Diviso tus pies al borde de la cama
mientras derramo
este deseo que se embrama:
Toco tus hombros -tu costado-
Tu cuerpo que se adhiere a mi cuerpo
…en esta noche
en esta noche.
Cuántos besos al cuello
cuántas manos entre la piel
se engarzan -se coagulan-
¡Oh! El aroma que se esparce en la habitación
que se filtra en los poros de mi carne.
¿Qué necesito ahora…? Si no estar contigo.
¿Qué necesito ahora…?
Si no volver a ti.
Volver a recostarme entre tus brazos
besar tus ojos
y tus mejillas
o cubrir tu desnudes con mi cuerpo desnudo
mientras emana
de entre la sábana
el humor de nuestro encuentro
y entre los labios un profundo silencio.
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Sergio Jacobo “elpoetairreverente”