joaquin Méndez

A mi amada amiga,

¡Ay querida amiga! La amistad

cuando es sincera y tan bella

no tiene nada más que una definición:

Cariño, bondad, alegría y luz de felicidad,

aromas y suspiros de amor…Todo eso eres tú.

 

Si mi amada amiga, tú eres ese ángel

que Dios puso en mi camino,

y aunque distante me llega tu energía,

 tu esencia de gran mujer,

me haces suspirar como a un colegial

enamorado de tus ojos, de tu sonrisa

y aunque me da un poquitín de vergüenza,

te diré que también de tu boca

y tus labios que son pétalos de rosas sagradas

que Dios creó junto con todas las flores

en el jardín del Edén.

 

Tu sonrisa ilumina todos los sentidos del alma

y del corazón despierta la alegría,

el sosiego, la ternura y el dulzor

de todas las frutas maduras y aromáticas.  

Tú mi amiga eres lo más bello existe,

el creador te tomó como ejemplo

para dibujar la belleza y la ternura.

Tú mi amiga del alma, eres la estrella

más brillante de mi universo.

 

Lanzo al viento mil besos,

lo más sabroso de mis emociones

 para que en sus alas lleguen y rocen tus labios

para impregnarte de lo más sincero de mi alma.


09/062012.
J. Méndez