Decir te quiero me da vergüenza
Pero el respeto no se pone mi abrigo
Amarte es mi condena
No haberlo hecho también
En el olvido se juntan los placeres
Amorosos, y sucios
Conversan, se pierden
Y no se despiden
En la sombra oscura del tejado
Los recuerdo
Y mi carne se agota de sentir envidia
Llora porque siente
Y la soledad se aburre de mi compañía
Solo el sueño cubre el árbol de mi delirio
Y las ramas de sus fantasías
Mi futuro se burla y clama clemencia al presente
El pasado lo creo yo
Invento delicias con tu aroma
Y las marcas de tus roces sabor a chocolate
Y el amor de tu silencio.
Este año será de siete meses
Y de cinco olvidos.