Ramón Bonachí

NADIE COMO ELLA

Donde quiera que va
le acompaña el Sol,
las estrellas van
persiguiendo su voz.

Sus ojos están
pintados de azul,
su sonrisa , ofrece ,
sonido fresco
de agua de manantial.

Ella es quien divide ,
también es quien resta,
allá donde la luz , pierde su temor,
es donde suma su amor.

Es tan suave
como el terciopelo,
como la piel del melocotón,
sus labios son
lluvia de abril.

Si miras bien,
en el interior
de su dorado pelo,
veras, donde
nace la luz.

Ella es quien enciende,
también quien apaga,
es la dueña del día
y la noche también,
a sus pies

se rinde el Sol

y  tambien la luna.



Lleva ese aroma
que  hace enloquecer,
creo que hasta el aire,
se posa a sus pies
para dormir.

Ella es presente ,
también es futuro,
solo con tocarte, borra del  reloj
las tristes horas del  ayer.

Ella es el aire,
que mi amor respira,
solo con mirarla
tengo claro que  ,
sé que la quiero
sé que la amo,
si se que la amo
hasta morir.