Hermann Garcia

FIN DE LA AVENTURA...

Que triste es el duelo

Aún más triste que ver morir al amor

Es una sensación de vacío

Que te duele el corazón

Es el mirar a la persona amada

Y cruzar miradas

Y nada

Ya no existe esa complicidad

Esa inocencia

Esa diablura compartida

Es el silencio cruel

La mirada negra

La confabulación de demonios

Esa pesadez en el pecho

La falta de aire

Que, por más que se inhale

Pesan los pulmones

Y te sientes desfallecer

El saber que el juego terminó

Aún conociendo las reglas

Y sabiendo que la muerte es insuperable

Duele.

 

El no saber como reaccionar

En esta nueva etapa

La mirada triste

La actitud derrotada

Y este dolor del pecho

El que te pregunten

Porqué la tristeza en tus ojos

El orgullo de esperar

Y solamente tener el eco del desprecio.

 

Ser tan intolerante al dolor

Y sentir que tu alma está incompleta

El llorar a la nada

El aullar a la luna

El no poder cambiar la realidad

El no querer cambiarla

El disfrutar de esta exquisitez

Sabiéndose masoquista.

 

Cómo poder transmitirte lo que en mi rompiste

Cómo reflejar en tu alma el dolor adictivo

Por qué asesinar a la conejita

Y quedarte sin su colita de la suerte

 

Por qué ese cambio de un segundo al otro

Planear un escape fortuito

Aterrizar los sueños fantásticos

Comer tierra

Odiarte

 

Pero el rencor es medicamento barato

Para la herida que supura pus

Y enajena los sentidos e irriga sangre en exceso

Que se acumula en la nuca.

 

El futuro vislumbra

Que volveré a tenerte

Arrodillada como tanto me gusta

Flagelando una y otra vez tu osadía

Castigando tú soberbia

Y dejando claro quien es mejor…

 

Pero mi orgullo prevalecerá

Y te destruiré

Lástima

Tan excelente amante que fuiste

Pero, ahora, eres fea

Me desagradas a la vista

Me repulsa tu olor...