Sergio Jacobo "el poeta irreverente"

SONETO CLANDESTINO

He mirado tus piernas de reojo

y  sin querer, me excito sin clemencia

abriendo sin pudor ese cerrojo…

¿cómo quitar del pecho esa dolencia?

 

No me importar afrontar la irreverencia

por tu edad y mi edad, me desalojo

(¿ cuántos hay que cansados de la ausencia

prefieren  terminar como un despojo?)

 

he mirado tus piernas lo confieso

ante tu juventud hay desventura

y mis labios se parten por un beso;

 

qué  más  da.  Si al vivir esta aventura

olvidamos la edad en el exceso,

y somos nada más… lo que esta dura.