El de las Rosas

ConfesiĆ³n de Amor

Amor, que te me desvaneces,

en las manos, por la distancia,

y, que el tiempo, que transcurre,

me amenaza hoy, con olvidarte,

quiero que sepas, que en mi,

siempre estaras, pues te llevo,

muy dentro de mi, como un tatuaje,

lapidado e  imborrable,

 tu nombre, resonando, en mis oidos,

como melodia, angelical y evocadora,

estas en mi, como cada amanecer,

y, a traves del tiempo,

se que te volvere a ver,

y, te dire, tantas cosas,

que dejaste, en mi ser,

de ti, me quedó

gravado tu rostro,

virginal y hermoso,

con esos labios, a punto de besar,

esa mirada, que envuelve sutilmente,

de esos ojos, que Dios ha puesto en ti,

tu figura de alabastro, cincelada en marfil,

que da a tu piel, la lozania 

de un copo de nieve,

que al contacto con el amor, se derrite,

en una entrega, de ternura y de pasion,

por eso, todo mi ser,

es para ti; eternamente...

aunque tu no estes, 

tan solo, porque aún te amo,

y nunca, nunca, te he de olvidar.

all right@reserved verano 2009