Eduardo Urueta

Conciencia enamoraria



 

I

Asómbrate,

tú:

ojos que en el mundo

he visto sólo en las lluvias,

asómbrate de que,

así,

espejo del anteojo,

cintura de dos manos;

hay una puta queriendo deshabitarte.


II


¿Qué de bostezo si Gamaliel

funda una conciencia enamoraria?

Si sus cejas

y su pecho

y su cuello 

son el penúltimo día de enero,

Y su huella

su vanidad

su humor de cielo

el primer día de mayo.

Pasaría, si yo le viera

antes de morir,

detrás de una cortina

sobre la asfixia

y enmendando al sueño,

que la boca hincharía su deseo

y la sonrisa en mi cadáver diera un gesto descarnado.


III

 

 

Piedra rosa

contigo diera los besos más incendiarios

como cañones tiernos

resumidos a un instante donde tu nariz fuera una caricia

y el mentón

un tiempo aceitunado.


IV


Alguien moriría por ti

todavía

bandera de  hombregalán meditado de noviembre.


Alguien

conspira con su humor

para salvarse de él mismo

y su lágrima es el silencio y la sequía.