Nilo Arturo

Mi Infierno

Mi infierno

 

Filtraban se lánguidos

Rayos de luz, moviendo

La negrura nocturna,

El  frío matutino.

 

Timbró el sonoro teléfono,

Cuando nunca a esa hora lo hace.

Timbró no sé cuantas veces.

Me obligó a abrir los ojos.

 

Al responder recibí,

voces que batieron mi alma

en el limbo del martirio.

 

Desde entonces  Escribo,

en los surcos de mi cutis,

tu recuerdo, lloro por dentro.