Felipe Cantarino Santillana

Carta: Asi me haces sentir

ASI ME HACES SENTIR

 

Podrá nublarse el sol eternamente;
podrá secarse en un instante el mar:
podrá romperse el eje de la tierra
como un débil cristal.
¡Todo sucederá! Podrá la muerte
cubrirme con su fúnebre crespón,
pero jamás en mí podrá apagarse
la llama de tu amor.

Fragmento de Rimas,
de G. A. Bécquer

 

 

Ahora en mi habitación, comienzo el ritual, cierro la puerta a mi espalda y conecto mis cascos, no necesito oír el mundo que me rodea, en su lugar Sarah Connor con su Green eyes soul suena potente y melódica, aislado del mundo durante estas horas de intensa magia donde puedo cerrar los ojos dejándome llevar hasta los recuerdos  pulsando teclas en mi procesador de textos.

 

En mi cabeza  todo se detiene en un simple recuerdo que acaricio con dulzura, tus ojos mirándome, mostrándome lo que sientes por mí.

 

            Cada uno de nosotros tiene una forma de mostrar su alma al desnudo, yo tengo la inmensa suerte de poder hacerlo de dos maneras muy diferentes, mediante un pentagrama y mi música o como lo voy a hacer ahora con las veintiocho letras de nuestro alfabeto, voy dibujar la sonrisa de esta mujer que con sus ojos me hizo enloquecer, con sus labios me dio su calor, con sus manos y caricias cerro mis heridas. Con estas veintiocho letras me gustaría tocar su corazón para que la oscuridad deje de ser un sitio terrible de miedos y monstruos para llenarlo de pasiones, abrazos y caricias, hacer caer lágrimas de ternura, mostrándola hasta que punto soy capaz de amarla, entregarle cada uno de mis latidos, mis sentidos, hasta el último aliento, quiero que vea que ya no se vivir si no es con la esperanza de volver a mirar sus ojos verdes pardo y besar esos labios que no puedo apartar de mi mente.

 

Con la guía de ese recuerdo me sumerjo en un mar de sueños y deseos, busco las palabras que lo definen como perlas ocultas en extenso océano de textos para encontrar mi propia forma de expresar todos esos sentimientos que siento palpitar dentro de mí, por que cuando estoy en este líquido que crean esas veintiocho letras, el mundo, todo,  se detiene, no existe nada a mi alrededor, me convierto en esa persona capaz de amar hasta la locura y dejarlo por escrito para intentar que ella se sienta tan amada como se merece.

 

Ahora al salir de este mar imaginario siento que increíble es este trozo de papel, pobre en esencia pero capaz de albergar tantos sentimientos, tantos sueños descrito con palabras que brotan como un manantial de la pasión, que dicta cualquier mente esclava de esta dulce desesperación.

Un trozo de papel capaz de soportarlo todo, permitiendo al enamorado,  que puede sentirse triste, risueño, que todo lo que se le acumula en el pecho, o como las famosas mariposas que se agitan en su estomago limitando o anulando su apetito, creando la imperiosa necesidad de expresar o descargar de alguna manera todo lo que siente palpitar. Y desde luego tanta intensidad fruto de las emociones, escondidas en cada latido, tras cada lágrima, entre sonrisas, incluso a veces rozando la propia locura del no saber qué hacer o como decir lo que se escribe a fuego por Dios en el alma de una persona que es capaz de amar hasta la saciedad, con la última célula de su cuerpo, todo ello acaba recogido en algo tan simple como un trozo de papel.

 

Siempre he pensado que hay algo más debajo de nuestra piel, dentro de este cuerpo finito y que el tiempo deteriora sin piedad mediante la oxidación imperfecta que nos proporciona la energía que llamamos vida, hay algo como un rosal, se enreda y clava sus espinas, te hace sangrar, duele a rabiar en todo tu ser, tu sólo puedes ver la belleza de las rosas y sentir su dolor. Ese rosal es el amor y sus experiencias, tanto buenas como malas.

 

Podría seguir escribiendo metáforas hablando de cosas que rozan la magia, cuentos de hadas, descrito todo ello con palabras ardientes de deseo forjadas en la más pura pasión, pero todo se reduciría a alargar dos simples palabras, “Te quiero”.

            Proponerse ser así de simple, sin dibujar con palabras los sueños que tengo contigo Nineta, es un reto maravilloso. Es tan simple como grande usar palabras como “te quiero” “te amo” “Te necesito” “te deseo” capaces de simplificar y describir algo tan grande e intenso que late en mi interior, lo que escondo en mi corazón cuando pienso en ti, “confío en ti” “quiero envejecer junto a ti” un compromiso que abarca la propia existencia

 

Ahora a veces tengo que callar, porque desde luego lo que siento es enorme, pero también hay que saber dosificar, ya que el amor es un hermoso juego, un juego de dos y en los juegos de dos siempre hay dos mentes, dos latidos y hay que sincronizarlos con paciencia y ternura, pero que compartan sueños y esperanzas. Cuando  te escribo, cuando busco que te estremezcas y tiembles Nineta con cada palabra mía, como poeta actúo como un relojero del corazón. Te busco, te miro a los ojos e intento hacerte temblar, intento sincronizarnos, dos mentes, dos latidos, el tuyo y el mío propio, para que resuenen en el universo como uno sólo.

 

Soy ese alguien que tú conoces y que al final ha llegado a encontrar el trozo de su alma que una vez le fue arrancado, tú eres ese trozo de mi vida.

 

Después de conocer las lecciones que he asimilado en esta vida y esta última etapa de la misma, he calmado todo lo oscuro que había en mi alma, he enderezado todo lo retorcido en ella, ahora puedes escuchar los latidos de mi corazón, ya que resuenan en cada palabra que escribo, en cada palabra que te digo, puedes sentir el crepitar del fuego que arde en mi interior como lo siento yo desde que era niño, respóndeme a esta pregunta ¿crees en toda esa magia que he encontrado en mi interior y que derrocho cada vez que me acerco a ti?

 

Hay algo que nunca te he contado de mí, sobre como son mis noches cuando dormimos separados. Como se desvanecen los sueños al dormirme, la oscuridad me atrapa y hace caer mis parpados, cuando mi cuerpo imita a la muerte, cuando puedo descansar de mis deseos, un suspiro que me desconecta de la realidad, de todo pensamiento. Cuando pierdo la conciencia de mi ser, de mis sentidos cuando la oscuridad se transforma en olvido.

¿Dónde voy? No tengo ni la menor idea, es un viaje que recorro sin desearlo y del que al final no quedan recuerdos.

 

Te busco alrededor mío,

Te busco a ti a mí alrededor,

Pero se que estas en el único sitio

Donde jamás se me ocurriría buscarte.

Estas en mi interior,

Sigues bailando al ritmo de mis latidos,

Tu mirada calienta mi alma.

 

Te busco alrededor mío,

Te busco a ti a mí alrededor,

Y aunque me desespera no verte,

Se que al dormirme

Tú sigues acostada a mi lado,

no te puedo abrazar,

pero aun siento tu calor,

no te puedo besar,

pero siento tus labios sobre los míos.

 

Pero lo importante es que al despertar es como si toda mi vida, la realidad me golpeara a la vez por toda mi mente, me siento feliz, porque en el momento en que mis ojos se abren y mi mente se centra en la realidad tu imagen se instala de nuevo en mi universo y de nuevo estoy completo, vuelvo a estar vivo.

 

 

Tienes esa mirada que me hace volar,

tienes los labios que al besar no sacian la sed de ti,

ese algo que hace mis sueños una perpetua realidad,

cuerpo de gitana que me hace soñar.

 

Una vez fui el esclavo de los muros de hielo,

los cree enmudeciendo los deseos del corazón,

ahora soy otro tipo de esclavo,

del fuego que puedo robar de tus labios,

del deseo de acariciar tu cuerpo,

abrazarte hasta sentirte dentro,

sin medida para esta forma de amar,

lo hago y punto, sin más,

quisiera gritarlo a los cuatro vientos,

mostrarlo al mundo entero,

sin silenciar mis sueños,

sin contenerme en silencios,

que cada poro de mi ser grite este deseo.

 

Te amo mujer, no esconde nada más mi cabeza,

nada llena tanto mi corazón,

no soy un caballero de brillante armadura,

pero si puedo ser bufón,

y en las noches de triste amargura,

la borrare con toda mi ternura.

 

No volveré a silenciar mis pensamientos,

ahora soy yo mismo, lleno de sentimientos

no existe el dique que me pueda parar,

si no te gusta deberías evitar

unos labios como los míos besar.

 

Siempre desee descansar en tus brazos y beber el amor que manaba de tus labios, perderme en tus ojos, dejar de sentir este frío sustituyéndolo por el calor de tu piel. Se que es lo que se agita en mi corazón, créeme es muy difícil ignorar todo eso que guardo en esta parte de mi cuerpo, cuantos sueños, cuantos deseos viven al ritmo de sus latidos, cuantas lágrimas serían necesarias para poder olvidarte, has sido la herida más profunda que he tenido

 

Sencillamente te amo Nineta.