Diaz Valero Alejandro José

El niño que tenía un sueño dorado (Capitulo 8)

Capítulo 8: Las llegadas al pueblo


Los vecinos de la granja que habían salido a buscar a Bernín, regresaron al pueblo sin el niño, y con un caballo de menos. Habían trabajado más de la cuenta buscando al caballo extraviado para retomar la búsqueda del niño. Fueron preguntando de poblado en poblado y no lograban obtener información, sólo al final del día, un campesino le comentó:

- Vi pasar a todo galope a un niño en un caballo

- Iban rumbo a la granja?

- No sé, como podría saberlo?

- En que dirección iban?

- Para allá!!!

- Gracias señor, dijeron todos, sus cansados rostros sonreían abrigando la esperanza de que fuera Bernín, porque esa dirección señalada por el campesino era precisamente hacia donde estaba la granja.

 

Entonces, convencidos de que la búsqueda había finalizado, se devolvieron al pueblo para confirmar la versión de lo que habían escuchado.


Bernín efectivamente, guiado por la voluntad de “Reluciente”,  ya había hecho su arribo a la granja y había sido muy bien recibido, todos los sufrimientos habían quedado atrás. Su mundo entre árboles frutales que brindaban su cosecha, le ofrecian una nueva oportunidad para reencontrase de nuevo con su sueño.

 

 

 

Regresaron cabizbajos

sin lograr el cometido

aquellos hombres cansados

renegaban del destino.

 

Y al llegar vieron con sorpresa

que del todo no les fue mal,

porque valió la destreza

de aquel bendito animal.


Continuará...