Es cierto estoy al borde de tus besos
al gabán de tus caricias
mis manos son memoria
de esa noche
¡oh! El néctar de tus senos.
El olor de tu sexo.
Es pasible y lerdo estar entre tus brazos
-que tersura de tu piel
sobre mis vellos negros que cubren mi pierna-
Esto es una encrucijada
entre ósculos y caricias
donde aprendí a sentirte….
Me enamoro de ti en cada instante
atravesamos juntos las calles
compartimos un café
nos metemos al cine
y sólo somos tú y yo entre la muchedumbre.
He mutilado a la tristeza desde que te conozco
además me satisface el día
con sólo pensar en ti
porque sé que me amas
a mí a un poeta a un simple orador de la amargura
que alfombra tu vida de mil versos
y deja en tus labios su recuerdo.
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Sergio Jacobo “elpoetairreverente”