José Domingo Arce

Norte en el Sur

 

Nunca pensé que el norte estaba en el sur,

que estaba hecho de madera, cemento y ladrillos,

que las palabras verdes del verano son hojas secas en otoño,

que es distancia y cercanía,

que es dolor y alegría.

 

Nunca pensé que el norte estaba en el sur,

que el saltamontes sordo no escuchó a las hormigas,

que el paso del tiempo era como ellas decían,

que es redención y fue rebeldía,

que es morir un poco y nacer de nuevo.

 

Nunca pensé que el norte estaba en el sur,

que el agua no corría porque estancada estaba,

que la palabra dormía,

que los oídos morían,

que la mano invisible se reía.

 

Nunca pensé que el norte es y fue sur,

que mañana era hoy,

que faltas y no estás,

que la apuesta está abierta y las cartas no se juegan,

porque mi final es el principio….