Quiero ser una hoja en blanco.
Agarra la tinta y comienza a escribirme,
ponte en mi vida, ponme como me sueñas,
escríbeme. Quiero ser para ti.
Dibújame unas cuantas sonrisas
tuyas y otras tantas que sean mías.
No te olvides del renglón siguiente.
Dale la vuelta a la hoja si no te alcanza.
No pares de tintar en mí…
Ahí, justo ahí, anota el día en que nos conocimos,
luego siguen otras letras que olvidaste,
no importa, continúa. Invéntame,
hoy soy de ti,
te pertenezco,
así que escríbeme para ti.
Ponme, ponme en tu alma,
escríbeme para robarme tu nombre,
que nadie lo sepa,
que lo digas sólo para mí.
Créame para amarte a ti,
crea el alma entera que no pudiste encontrar.
Crea en mí el relleno de tu ojo.
No me pongas un punto final,
que nadie lo haga
de lo demás…
me encargo yo.