Alma al aire

De nena caprichosa a mujer paciente

Quién no sabrá de los aquís y los ahoras?

quién no enarboló lo de vivir plenamente?

cortando todos los pimpollos de rosas

y bebiéndose toda el agua de la fuente.

 

Quién no dijo "yo" cuando todos dudaban?

quién no fue a buscar al destino escapista?

desafiando a la vida misma

y a cualquier otro punto de vista.

 

Más llegó la revancha, sonriente el destino,

la vida altanera me miró de reojo,

y no hizo falta matarme en el viaje

ni sembrarme el camino de muchos abrojos.

 

Pero cambiaron las reglas del juego,

ya no fue más aquí ni fue ahora,

ya no valió ir corriendo a buscarlo,

ni acicalarme otra vez gata flora.

 

No señor, no, usted que dijo,

que a todo o nada podía vencer,

no señora, no, usted que decía,

de este agua yo no he de beber...

 

Cruel, qué cruel fuiste vida,

tal vez de otro modo hubiera entendido,

tal vez existía otra vuelta de tuerca

para cortar mi capricho tan bien mantenido.

 

Pero ya ven, no siempre se puede

alcanzar lo que uno se proponga,

no todo de nosotros depende,

no todo es aquí y es ahora.

 

Así que aquí estoy, ex raza de niña,

mutación testaruda con brotes de gloria,

esperando paciente a que cambien los vientos

y pueda otra vez adueñarme la historia.

 

Así que acá estoy, hecha mártir del tiempo,

sin quererlo crecí a borbotones,

qué fe que nos tiene la vida!!

de creer que a pruebas seremos mejores.

 

Hoy me miro al espejo y observo

en las pupilas estoy diferente,

más oscuras, también más profundas

y al mismo tiempo, resplandecientes.

 

Y se sonríen sin risa los ojos,

de algún modo me siento más fuerte

y el destino y la vida, satisfechos,

por el cometido transformado en hecho,

de nena caprichosa a mujer paciente.