Diaz Valero Alejandro José

Cuentos breves, excesivamente breves (8va entrega)

1.- ADIOS

Tantas horas de esfuerzo para poder obtenerlo, y cuando lograron juntarse, fue muy breve su encuentro. La necesidad apremiaba; así que con toda la tristeza del mundo, tuvieron que despedirse. Sólo se escuchó un suspiro de desgano que decía a sus adentros: ¡Adiós salario!


2.- ÚLTIMO VISTAZO

Alzó tristemente su mirada y vio a su verdugo…Luego sus ojos se desorbitaron.

 

3.- GANANDO LA ORILLA

Sus manos se agitaban violentamente, sus gritos desgarradores rompieron el silencio; el agua seguía girando en su remolino tragando su presa. Después un largo silencio; luego el hombre asustado con su pecho jadeante  yacía en la orilla, en un mar de confusiones,  sin saber cómo había llegado hasta allí.

 

4.- ASESINATO

Vio como cometían el asesinato, observó a medias, como le hundían el puñal en el vientre; tuvo que taparse los ojos con ambas manos, porque no soportaba tanta crueldad… Asustado y con el pavor todavía dentro de sí, apagó el televisor y dejó de ver la película.

 

5.- PRIMERA NOCHE

Los novios después del casamiento llegaron a la alcoba; ella angustiada, él ansioso; sólo se miraban por  temor tal vez a cruzar palabras inoportunas. Sólo ella se atrevió a decir, dentro de evidente angustia: " estoy triste, esta es mi primera noche lejos de casa".

 

6.- INÚTIL ESPERA

El tren llegó, él estaba ansioso esperándola en el andén. Los pasajeros bajaban y subían  y la mujer no aparecía. Luego el tren partió, y ella confundida, levantó su cabeza y volteó su mirada atrás para ver como quedada sepultada una falsa esperanza de amor; mientras el tren se alejaba dejando tras sí, una larga estela de tristeza y humo.


7.- AMOR Y VILIPENDIO

Ella era dueña de una larga historia; muchos la amaban y hasta se sentían orgullosos de morir abrazados a ella, otros en cambio la vilipendiaban, la miraban con odio y desprecio. Pero ella seguía serena con su asta levantada, blandiéndose alegre, mecida por viento.

 

8.- TRAGEDIA  REPETIDA

El hombre leía con preocupación la prensa. Otro avión se cayó, vaya tragedia Dios mío, pensaba hastiado de tanta desgracia;  cerró el periódico y lo dejó sobre el sillón mientras caminaba hacia su habitación, dejando en la sala el viejo periódico, que lucía cansado  de difundir la misma noticia, en sus siete días de vida.

 

 

9.- SÍ HABÍA ALGO MÁS

Llorando malhumorada, la niña regresó del parque; el columpio no tenía tabla, y el tobogán no tenía escaleras. ¿Podrá haber algo más terrible que eso? Sí, le contestó su hermano, mientras pícaramente señalaba con el dedo índice una tabla desvencijada y una escalera retorcida que él guardaba en el desván de la casa.

 

10.- VUELO POR NECESIDAD

El niño miraba fijamente el pichón que torpemente volaba, y desde abajo lo aupaba diciéndole emocionado: ¡Vuela pajarito, vuela! que tu mamá desde el cielo te acompaña.


*****