Danilo.

Asomandose a la pequeñez.

Toda mi grandeza delante de ti,

es saberme muy pequeño,

que soy  como un niño

 y que mi vida es un misterio.

 

Se que para que tu me aceptes

solo necesitas saber lo que siento,

hallar en mi la sincera humildad,

de necesitarte de verdad y que eres el centro.

 

Cuando redescubro que mi vida tiene sentido,

que tengo algo que dar y puedo,

encuentro la paz y la alegria necesaria,

para elegirla y celebrarla de nuevo.