Kumala

Jesús, un Sólo Nombre que Alabo

Lleno de esperanza siempre mi corazón

Cuando con alegría espero en el Señor.

El mundo tal vez no puede aceptarme,

Mas sobrepasa todo el amor de Jesús;

Él dio su vida por un pecador como yo.

Jesús, un sólo nombre que alabo;

Su clemencia ha tocado mi alma.

Cada día para mi es el regalo de Dios,

Cuán su palabra me alcanza día y noche;

Cúan sus promesas están firmes,

De siglos a siglos son sí y amen.

Sin la guía de su espíritu soy nada

Porque necesito su luz en mi vida.

Acompañado por Jesús con su fidelidad,

Más cerca de mi rey soberano es mi deseo.