"Comernos a besos era excitante,/ sobre tu cuerpo yo o sobre el mío tú,/ pero un día no nos gustó el restaurante/ o fue q nos aburrió el menú".
Dime tú ¿cuál es el paso a seguir?
¿Cuál será el título de esta obra?
¿El amor que nunca quiso existir
O el corazón donde el amor sobra?
Dije sobra pues parece estar demás,
No es algo que esté en el camino,
Será por culpa de ambos esto, quizás
O son jugadas que nos hace el destino.
Pero lo cierto es que llegamos aquí
Y nos encontramos cruzados de brazos,
Tú ya no vienes como antes tras de mí
Y yo ya ves, tampoco sigo tus pasos.
Estoy revisando los capítulos anteriores,
A ver en cuál de ellos fue que fallamos.
Si como amantes parecíamos los mejores
Y fue la mejor la pasión que entregamos.
No hay otras personas, no es ése el motivo,
Pareciera pues, que el amor se nos acabó…
Al escribirlo me cuesta creer lo que escribo
Y a ti ya ni siquiera te importa lo que digo yo.
No preguntas si soñé y yo tampoco pregunto
Y este silencio parece cuento de nunca acabar,
No queremos despedirnos pues ése era el punto
Al que nunca ninguno de los dos quería llegar.
Pero si no nos despedimos ¿qué hacemos?
¿Cómo se llama lo que jugaremos ahora?
Se supone que ya tú y yo no nos queremos
Y fíjate que aquí, ninguno de los dos llora.
Te propongo que en silencio nos vayamos
Y no miremos atrás, tú sabes, por si acaso,
Así el nombre de esta obra lo evitamos…
Y no tenemos que llamarla sólo “fracaso”.
¿Sabes? Creo en Dios, amándote lo he visto
Y me pregunto, aunque tal vez suene a tontería,
Si será que el amor puede ser como Cristo
Y resucitar como lo hizo Él… al tercer día.
Y esto vendría a ser sólo como una pausa,
Para vivir luego un regreso más fuerte…
Porque murió el amor y no sabemos la causa
Y tenemos derecho a querer cambiar la suerte.
Pero si resulta que tú y yo nunca volvemos
Y el milagro no se nos da de ninguna manera,
Habrá que pensar que de verdad no nos queremos
Y que el amor que parecía ser… no era.