Un Rincon Infantil

La pelota de cuero

 

Con una pelota de cuero

que hallé en la calle tirada

me divierto alegre y juego

con los chicos de la barriada.

 

Ya la consideraba mía

por habérmela encontrado

y jugar con ella podía

por calles del vecindario.

 

Hoy ha llegado su dueño

y su pelota ha reclamado

y entregársela ya debo

porque yo nunca he robado.

 

Adiós pelota de cuero,

adiós mi querida amiga,

voy a reunir dinero

para comprar otra parecida.

 

 

 

Alejandro J. Díaz Valero