Pachuco

Aquí aguardo tu oferta

Hoy pongo mi cariño en pública subasta

mi fervor, la dedicación de mis escritos

todo mis sentimiento,  yo el iconoclasta

sucumbiendo a la carencia de un amor bendito

 

Quiero una mujer, que haga de mi su vicio

que aprenda a amarme hasta el sacrificio

le corresponderé con pasión hasta la muerte

y  seré su bendición, buen destino y  suerte

 

Estas manos matarían si en ello hay cariño

pero no temas que para ti son sólo dulzura

compra ahora este corazón lleno de mimos

llévate de oferta mi calor y mi ternura

 

Permíteme conocerte  y revélame tu piel

busco tanto quien se acostumbre a lo mío

a esta cara agria, a este cuerpo sin miel

a los momentos alegres, a mis minutos sombríos

 

La noche es larga, cuando miras la inalcanzable estrella

y quiero despertar aferrado a  una mano amiga.

A quien le importa tu apariencia, sea extraña, sea bella

lo que cuenta es quien te da el impulso en la subida

 

Hoy me vendo por migajas de cariño

lo doy todo por tenerte a mi lado

para sentirme de nuevo como niño

aprendiendo a conjugar el verbo amando

 

Sabes, de sólo pensar que te consigo

se me erizan los cabellos del deseo

las cosas que quiero contigo no las digo

tiemblo de alejarte y provocar  tu  miedo

 

Sea torpeza, error, resentimiento, premonición

que pongan alas a tus pies y cadenas a tus sueños

y que fugues asombrada de tu propia emoción

y de tanto amarme te pierda siendo casi ya tu dueño

 

Para que eso no ocurra es preciso que me compres

pues quien paga no teme, y tal vez a la larga aprecie

que me tomes como tuyo, que me uses y si me rompes

que me mimes, custodies  y repares, una y mil veces

 

Aquí aguardo tu oferta  rogando al cielo todo esperanzado

dame el precio cabal que te dicte el corazón y ya soy tuyo

no te fatigue mi larga expectativa ni mi rostro iluminado,

es el fuego interno que refleja tu presencia que ya intuyo