Freddy Duque

A ella

A ella la encontré en la calle;

estaba soñolienta y muerta de frío.

 

La tomé en mi regazo

y le enseñé la nostalgia.

 

Le enseñé a pintar alas en el viento,

a descifrar lo que dicen las miradas,

a caminar bajo las tardes acopladas,

bañadas por un lóbrego silencio.

 

Le regalé mis viejos

y abrumadores poemas,

y lo que dicen mis letras.

 

Le obsequié las lunas nuevas

y las que, cansadas,

ya no me alumbran.

 

A ella la encontré en una biblioteca,

oculta entre los pasajes de la historia.

 

Le aprendí a caminar tácito,

a enjugar las penas con alegría,

a ver dibujos animados,

y a soñar con el tiempo ignoto.