Carlos M.A. Cascante

EL SIGNIFICADO DEL 24 DE DICIEMBRE

Luces de navidad se ven por las ventanas,

luces sin cesar por toda la ciudad,

 luces en el día, luces por doquier,

luces en la tarde y al anochecer,

luces adornadas o quizás sin encender,

pero hay luces por doquier.

 

 

En un monte muy lejos de la ciudad vivían dos familias, las cuales toda su vida se ayudaron mutuamente.

Ellos compartían sus cosechas, ganado, terreno y vienes, lo único que los separaba era un pequeño río que pasaba en medio de sus tierras, problema que solucionaron construyendo un gran puente, y sobre el una preciosa casa para poder pasar mas tiempo juntos, y de hecho,  ese era el lugar en el cual desayunaban, almorzaban y cenaban juntos.

Nunca les falto nada.

Una vez estaban dos de los jóvenes cuidando el ganado, cuando uno de los amigos de la familia les tuvo que llevar algo de comer,  ya que estaba entrando el invierno y los pastos al pie de la montaña donde vivían no daban a basto para poder alimentar a todo el ganado, por  eso tuvieron que subir a la montaña para poder alimentar a los animales; cosa que hacían cada año por ese tiempo.

Quien que le llevo la comida espero que acabaran para regresar, pero los pastores le dijeron:  Espera, quédate con nosotros, así nos iremos juntos y no tendrás que cargar tantas cosas, solo las pondremos sobre el ganado y no tendremos mas que hacer, sino cuidar que no se caigan.

A el joven le agrado la idea y decidió quedarse. 

Al ser ya casi la hora de irse, el muchacho cargo las cosas sobre los animales y se recostó a dormir un rato, cuando el ganado ya estaba reunido y listo para ir de regreso a la granja, los amigos llamaron al muchacho que estaba durmiendo y el despertando dijo: aun estoy algo cansado, voy a dormir un poco mas y luego los alcanzare, sus amigos no insistieron ya que sabían que ir guiando el ganado toma tiempo y que El los alcanzaría sin dificultad.

Desgraciadamente el cansancio del muchacho fue tanto  que al despertar ya había oscurecido mucho, tanto como para poderse orientar el la noche.

Un poco asustado de levanto y trato de ver las estrellas , pero el cielo estaba nublado y buscando el resplandor de luna  recordó que era luna nueva, pero sin desesperare subió a la cima de la montaña para ver donde se podía observar el resplandor de la casa sobre el río, en la cual siempre había una luz blanca encendida, era la luz de una lámpara de aceite que por la noche iluminaba la casa y el puente,  para poder pasar al otro  lado sin dificultad en caso de que hubiera alguna emergencia.

Al ver El la luz, con entusiasmo se preparo para emprender el camino de regreso a casa, cuando de pronto resbalo y cayó de espalda lastimándose al caer, después de haberse recuperado del dolor se levanto y vio otras luces al lado opuesto de su casa, luces de colores,  verdes, rojas, amarillas, azules y muchas mas, luces que nunca había el visto, y pensó: Que son  esas luces? No las conozco!

Y decidió ir a investigar de donde venían tan llamativos colores.

Camino durante 9 días, cruzo montaña, atravesó ríos, paso hambre y frío, asta que al fin llego a la ciudad de las luces de colores.

 

En el camino sentía regresar, pero aunque su corazón deseaba volver, su mente y sus ansias de saber que eran esas luces le decían: algo tan colorido y bello, tan placentero y agradable a los ojos debe valer la pena verlo, debe ser bueno estar allí, por ese motivo decidió continuar su camino asta llegar.

Después de la gran travesía vivida se sintió satisfecho al entrar en la ciudad, pues había logrado llegar al lugar por el que se había esforzado tanto, estaba fascinado con tanta variedad de colores, no podía esperar contárselo a sus familiares y amigos del monte, así  le llamaba al lugar del cual el venia ya que no tenia nombre.

 Pero aun con toda la alegría y satisfacción que sentía no dejaba de tener hambre, nueve días alimentándose de solo de lo que el camino le daba no eran agradables,  así que fue a una casa, la cual estaba cerca de la ciudad y como no estaba acostumbrado a otra cosa toco a la puerta y pidió algo de comer, le dijeron: regresa en diez días, en diez días será 24 de Diciembre, ese día te daremos de comer, hoy  no tenemos tiempo, tenemos que hacer los preparativos para esa fecha, y cerrando la puerta lo dejo afuera. Extrañado el muchacho pensó que talvez se  trataba de una persona sola o con un niño que tenia que hacer preparativos para esa tan famosa comida del 24 de diciembre, así que se dirigió a otra casa y recibo la misma respuesta y así continuo de casa en casa sin recibir nada de comer, y de puerta en puerta llego a la centro de la ciudad donde encontró masas de personas en las calles que caminaban con bolsas llenas de objetos, personas que entraban y salían de las tiendas, parecía como si el mundo a su alrededor no existiera, no veían a nadie (esa imagen daban), el muchacho trataba de hablarles amistosamente pero era como si estuvieren sordos, cada quien solo se interesaba en si mismo y en sus cosas, parecía que no les importaba lo que estaba pasando, de repente un niño tropezó y callo al piso, mientra el niño permanecía tirado en el piso llorando, la gente continuaba caminando y lo único que hacían era levantar los pies y esquivar el obstáculo en frente, enfadado el joven se acerco y levanto al niño, lo limpio del polvo con el que se había ensuciado y le ayudo a buscar a su madre, al encontrarla, la madre desesperada se tranquilizo y le agradeció al joven por su ayuda, en seguida le pregunto que como le podría pagarle, el joven quien nunca había demandado ser recompensado por su ayuda dijo: podría darme algo de comer?

Ella lo invito a su casa y le dio de lo poco que tenia ya que su esposo estaba de viaje y llegaría  el 24 de diciembre, fue entonces cuando el joven pregunto: Que día especial es ese?  Ella admirada y algo confundida le explico, y no podía creer que el no supiera lo que era la Navidad, el joven después de haber escuchado la explicación de  la dama dijo: En el lugar de donde vengo no conocemos ni sabemos nada acerca de las fiestas o celebraciones de Navidad, la mujer le dijo: En el tiempo de navidad todos están felices, comparten todo y pasan tiempo juntos, entonces el joven entendió por que le dijeron ``regresa en diez días, ese día te daremos de comer.´´ Después de haberse dado cuenta de lo que significaba la Navidad para el mundo a su alrededor pensó;  no valen la pena tantas luces de colores si la luz que esta en el corazón de las personas es negra, no vale la pena reunirse y compartir todas las cosas el día de navidad si el resto del año a cada quien solo le importa lo suyo y no los demás, así que decidió regresar al monte „del lugar de donde venia".

Agradecido par la comida se despidió y empezó su viaje de regreso, nueve días de camino asta la cima del monte, y al estar allí alcanzo a ver la luz blanca de la lámpara de aceite que estaba en la casa del puente y alegre se dijo: Esa luz la conozco, así que se dirijo hacia ella, al llegar ya era la madrugada del día diez  después de haber salido de la ciudad y  fue recibido con un gran banquete, El decidió no hablar de su ausencia o de lo que había vivido, tampoco quiso contar donde había estado, todos respetaron su decisión y al haber terminados con el banquete, levantándose  El dijo: Asta hoy este lugar se llamaba El Monte, pero hoy por estar todos reunidos compartiendo juntos lo llamare 24 de diciembre.

„Pues para ellos todos los días en Navidad"

 Historia basada en el libro de Hechos capitulo 4 versículo 32 (La Biblia)

 

MORAL:        

1-No te pongas a dormir cuando hay que trabajar.  -Todo tiene su    tiempo-

2-No seas curioso por las luces de colores, aunque sean llamativas.

3-no te esfuerces por saber de donde vienen las luces, no te fatigues ni pases hambre por algo que solo dura un corto tiempo.                 

4-No dejes de recoger al caído, eso siempre será recompensado.

5-No dejes de valorar ni de agradecer el esfuerzo de otras personas, aunque sea poco.

6-No olvides el camino por el cual anduviste, para que no te sea tan difícil regresar.

7-No sigas las luces de colores que no conoces, sigue la luz blanca que ilumina tu casa, sigue la luz que conoces y aunque estés en tinieblas y el cielo este nublado llegaras a casa.

Hechos 4, 32                                                                                                                  

Y la multitud de los que habían creído era de un corazón y un alma; y ninguno decía ser suyo propio nada de lo que poseía, sino que tenían todas las cosas en común.