JUSTO ALDÚ

ÓPERA PARA CUERDOS

He vivido bajo aguaceros la libertad completa

hasta beberme la vida con las manos.

Soy libre por la lluvia.

Me descalzo del nombre citadino

y  florezco a la par de los cafetos;

la lluvia es mi bandera,

pone azahares en mi entorno,

sacude mi casa;

viene a ordenar todas las siembras

con esas notas traídas de lo más celeste.

Salvadora del páramo, libertadora mía.

Ni el cristal se enturbia,

ni la guitarra enmudece.

 

Viajo por  arroyos y escucho su ópera.

Subo a los cerros en neblina envueltos

a cantar a los árboles

lavándome la cara y los malos pensamientos,

deteniendo  el tiempo

para que haga memoria de mi.

Es curioso,  me ha vuelto a otras edades

apuntando las arrugas que miro con respeto.

cual actor de ópera.

 

Saludo a la vida deseándola más plena

todos quieren verla, escucharla, acariciarla.

La vida como la poesía, vino para ser escuchada

Como una ópera…, para cuerdos…