Caminando… reiniciarás éste muchas veces.
Reirás con convicción y actuarás con profesión
al despertar de canciones y listo estarás.
Caminando… sanará tu corazón.
Aunque anclado permanezcas, tu vida cambiará,
brillará tu luz y tu recinto llenará,
como la plegaria en verano cuando el sol
radiante despunta en un día de calor ardiente.
Caminando… encontrarás vivencias nuevas.
Esmeraldas risueñas pintarán tus ojos de alegría
y los corales en tus labios florecerán cálidos
ante la frescura de un beso nuevo.
Caminando… tropezarás con mieles de panales
que abundan en horizontes mil
con el infinito beso de la mar y el cielo
para entrelazar tus dedos entre unas manos
que buscan tu aliento con afán de encuentro.
Caminando… en la inmensidad fusionarás tu piel
al más vivo sentimiento, con canto de bosque,
con coro de pájaros, lluvia y arreboles
llevando contigo el anhelo de un amor verdadero
encontrar con porfía cada día.
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