Agradezco por cada error que he cometido,
porque cada mal paso,
cada mal pensamiento,
cada desventura,
cada momento de dudo,
me ha llevado a conocerte,
me ha llevado a quererte,
y me ha llevado a amarte,
más de lo que puedas imaginarte.
Dejemos a los sentimientos,
guiarnos esta noche,
por la calle de nuestros deseos.
Dejemos que el momento,
nos mantenga en sus brazos,
pero no permitamos,
que nuestro amor,
se escape de nuestras manos.
A como yo he caído,
y me he perdido en tus ojos brillantes,
a como yo me deje llevar,
por tu voz tan celestial,
a como yo me derretí,
al percibir tu olor tan cautivante,
y a como yo me rendí,
ante este corazón palpitante,
caigamos, perdámonos, derritámonos, y rindámonos,
por lo que implora nuestro corazón,
dejémonos consumir por esta llama de gran fulgor,
y caigamos en el amor,
aunque no tengamos,
ninguna razón.