Veo su risa
como un bisturí blanco,
esa premisa
ya sugiere espanto.
En su bolsillo
guarda un poema,
lleno de pólvora
un castillo de arena.
Un estampido
abre un tajo
ese sonido
que te tira abajo.
Un nido de tripas
adornado de sangre
con negros coágulos
y un aura violeta
y el olor del horror
y la imagen sincera
plasma lo horrible de la verdad.
De lo que realmente llevamos dentro.
sangre, heces, fluidos execrables,
grasas, huesos, membranas enervadas,
basura.
Realmente quieres ver mi interior?
me quieres conocer?
tienes ganas de buscar mi espíritu entre mis entrañas?
lo dudo.
Yo tampoco quiero conocerte.