Nunca nos damos cuenta de porque pasan las cosas
culpamos al destino, sabiendo que se marchitaron las rosas
a veces es nuestra culpa de la pena que cargamos
unos pueden vivir con ella y otros se la viven lamentando...
Mi destino no es tan bueno, pero tampoco ni tan malo
pues tengo amigos, familia y un corazón a mi lado
a todas esas personas les doy las gracias por enseñarme a vivir
en este mundo de locos en el que todos soñamos y sueño ser feliz.
Con el paso del tiempo, me he dado cuenta de algo muy sabio
los sueños no son el destino, porque no están en nuestras manos
solo son nuestras metas que debemos lograr y a cambio
recibiremos eso que queremos, soñamos y hemos anhelado.
Todos pensamos como será el futuro y que es lo que ocurrirá
viviendo un destino que no esta escrito y que no sabemos si nos abrazará
escondidos o temerosos de lo que pasara en la vida
porque nadie sabe que nos prepara o si abra alguna salida
nunca podremos saber que vendrá y ni podremos mentirnos...
ya que todo eso que viene solo es parte del Destino.
Julio Lestat