ALVARO J. MARQUEZ

EL HÉROE VIRTUAL

"Más que tomar un libro para aprender/ y no acostarse sin saber alguna cosa nueva,/ le interesa mucho más saber/ en su juego cuántos muertos lleva".

 

Te mandé un mail y extrañaste mi carta,

ya ni de esperar puedes sentirte muy harta

porque lo que te envío llega de inmediato.

Los discos de vinilo ya no los puedes ver,

incluso los CD ya están por desaparecer

y la música la oyes en sofisticado aparato.

 

En los teléfonos ya no vemos un discado,

ahora tienes un celular ya bien adaptado

con teclas que te hacen lo inimaginable...

Escuchas la radio, hasta ves la televisión,

te envían fotos desde una lejana nación

y entras en Internet con rapidez envidiable.

 

En tu casa tienes muchos aparatos modernos,

que se dañan como todo porque no son eternos

pero te prestan un servicio sin duda innegable.

Tus hijos ya no salen a jugar a las escondidas,

hay videojuegos que llenan mucho más sus vidas

y además si se aburren, tienen la TV por cable.

 

Te tranqulizas por tener a tu hijo en tu casa,

pero no te has dado cuenta aún de que pasa

mucho tiempo entretenido ante una pantalla,

No lo ves que se preocupe nunca por leer

y hasta sus deberes de la escuela deja de hacer

pues le parece que el videojuego “da la talla”.

 

¿Te has interesado por ver cómo se divierte?

En algunos juegos impera la temible muerte

y matar los convierte en héroes virtuales...

Soldados expertos en toda clase de ataques,

su habilidad no hace falta que destaques,

porque en destreza para eso no hay rivales.

 

Ven el acto de matar como algo muy natural,

admirar mucho al que mata llega a ser normal

y la emoción de tu hijo se expresa en gritos...

Todo tiene un límite venga lo que venga

y hasta para que tu hijo con eso se entretenga,

los riesgos en verdad pueden ser infinitos.

 

La modernidad, la tecnología, el llamado progreso,

no nos salvan sin embargo de caer en el exceso

de dependencia de todas estas cosas increíbles.

Seamos pues personas realmente responsables,

si hablas con tu hijo las consecuencias serán probables

pero las soluciones ya no serán imposibles.