taty merced

En un principio...

 En el párpado crepuscular del horizonte

se entretiene rojizo unos momentos.

Los pájaros aquietan sus alas y enmudecen los trinos.

Ronda algo así, como un vacío entre insomnios de insectos.

Se derrama, tal vez, un aguacero.

Se deshuda en la sombra para entregarse a las bonddades de la luna.

Toma distancia, se oculta

y se deleita en el sueño o inventa pesadillas

Al tiempo un cántico desde lejos lo reclama

De luz un destello lo provoca iridiscente y profano

Destiende sus oscuras vestiduras

y lava su cara de silencio... se hizo un nuevo día