Kohatmi

A mi familia

A ti mamá... que con cálida dulzura
en tu vientre me acunaste,
y con gran amor y ternura
me enseñaste un Dios presente.

También con esmero y cariño
me enseñaste a ver en todo
el valor de lo pequeño,
que es lo que hace grande al mundo.

A tí papá... que aún siendo joven
con un alma enamorada,
dejaste que tus sueños vuelen
para que no me falte nada.

Y con temple espiritual
me enseñaste el trabajo honesto,
a la verdad ser leal,
y a la vida, agradecido.

A mis hermanos... que entre risas y juguetes
compartieron mi alegría,
y entre llantos y curitas
me taparon picardías.

A mi familia... gracias, infinitas gracias
por ser parte de mi vida,
por tanto amor y cuidados,
por sufrir con mis desgracias,
y gozar con mis aciertos.