Gerardo Barbera

EL LIBRO EN MIS MANOS

Tomo el libro en mis manos, lo sueño,

trato de asimilar el pensamiento del autor,

es acerca de la naturaleza humana, la esencia.

Una leve lluvia solitaria navega en mi mente,

las ideas se convierten en nubes lógicas

que construyen el infinito más allá del tiempo,

se escapan como cascadas delirantes

que se llevan todas las flores; así, de repente

se esfuman en silencio poco a poco los nombre

y te queda entre las manos un mundo desafiante,

sin color, sin tamaño, todo lo creamos

y le damos una vida que no existe,

porque  lo que tocamos está ahí, vacío

sin propiedades, esperando desaparecer

como se desvanecen las fantasías de los niños.

 

 

La existencia es un tornado en el tiempo,

una ilusión fantasmal en el océano azul,

quisiera que mi castillo durará una eternidad,

pero cada paso es una huella que se olvida,

cada palabra es un sonido en la oscuridad.

El mundo es lo vivido detrás de mis ventanas,

ahí cada beso se convierte en fuego de amor,

ahí sufre, ama, llora el alma iluminada.

En la conciencia escondida en las entrañas

el universo sale a la luz,

es una luna  pálida, fascinante, solitaria

tocamos, sentimos lo que es exterior,

el otro, las cosas son extrañas, ajenas

perteneciente a otro universo,

distinto a todo lo que soñamos,

nuestro hogar lo imaginamos  bello,

como una lágrima en la arena,

que sin lógica ni razón

 te siegan y te encadenan.