Guillermo Sánchez

Luna Cómplice

Es como la música bella
aquella luz que acaramela
con sus hilos plateados
reflejándose en los 
corazones de los enamorados.

Es el romance prohibido
de una efímera noche veraniega.
Acompañanos blanco faro 
en medio de la oscuridad
a aquel dulce lugar..

Eres como un vino agridulce
que solamente se deja saborear
en tus labios de carmín,
que me aprisionan con cadenas invisibles
atándome a tu fina y suave piel.

Soy aquel que como una vela 
se derrite ante la llama apasionada
que emite tu figura, que acurrucada entre las sedas,
me invita a danzar las curiosas melodías
que una luna cómplice toca hasta el amanecer...