marco augusto

Castillo de arena

Dentro de un castillo de arena

con adornos de caracol,

fui inventando un idilio

que emergía de mi gran pasión.

Amor idealista,

que el alcatraz contempló,

entre las murallas de arenisca

de mi solitario fervor.

Fue tan sólo humo

que la brisa transportó,

un amor sin futuro

que emergió

de mi recinto de ilusión.

Las olas celosas

de la pasión que surgió,

arrasaron con las murallas

del castillo,

de mi más encumbrada aspiración.