Armando G.

Ven, no temas

Ven, no temas
saca de tu mente los fracasos vividos
olvida las promesas de antaño,
 entrégate con la ilusión de la adolescencia
como mismo te entregaste por vez primera
llevada por la inocencia.
 
Entrégate
como si esta fuera la entrega inaugural
como si recién descubrieras el amor
como si hoy fueras una flor
bañada por el roció mañanero.
 
No temas,
solo entrégate y déjate llevar
por las proposiciones de hoy,
por la tempestad del deseo
entrégate al ruedo
de las pasiones imperecederas,
entrégate al amor
nacido de estos versos,
entrégate a mí
como si fueras virgen vestal
en el altar sagrado de los dioses paganos.
 
Entrégate hoy
mañana
entrégate siempre
con la fresca brisa del amanecer
y en la tibia tarde
cuando los cuerpos lo reclaman,
en la madrugada
cuando aun es muy temprano o quizás muy tarde.
 
Entrégate y conocerás
 la quietud del mar en los amaneceres  
la furia del huracán
desprendiendo de tu cuerpo las vestiduras,
la lava ardiente brotando del volcán
corriendo por las escondidas laderas  
hasta llegar a tus profundos valles.
 
Conocerás
todo el amor que te puedo dar en un beso
cuánto vale en el medio de la noche
cuando los cuerpos están en reposo
sentir mis brazos protegiendo tu cuerpo,
sentir mis labios besándote
mientras tu descansas en mi pecho.